domingo, 30 de mayo de 2010

IMPACIENCIA


Tú eres la impaciencia.
Impaciencia de hallarme
sin mirar lo que te muestro.
Sólo ansias lo por llegar.
Eres la impaciencia joven,
de espuma fugaz
que tu lengua se apresura
en lamer.
No me concedes tiempo,
un tesoro que desconoces,
y que a mí me va impregnando
desde los párpados
hacia mi centro,
alisando las grietas
que el dolor,
con su cincel vivo,
horadó en mi raíz (AB 30.5.10)

2 comentarios:

  1. Un beso aqui tambien, no es buena la impaciencia, pero tampoco la eterna paciencia.

    Me gustó mucho este poema, me gusta volver a leerlo

    Ana

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  2. Qué cielo eres, Ana. Y no por las cosas que me dices, sino por la belleza que mana de ti cada vez que pasas por algún sitio.
    Un abrazo

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